Desencajando recuerdos
Esto podría ser algo así como la continuación de encajando recuerdos. O tal vez no.Resulta que el fin de semana pasado mis padres me visitaron y me trajeron un chingomadral de cajas que tenía en Guadalajara (y las que faltan). Así que esta semana por las tardes, me he dado a la tarea de abrir y acomodar.
En su mayoría, es ropa. Yo no entiendo porque sigo guardando porquerías que ya se que no me voy a poner nunca: Empaqué. Mande a Guadalajara. Más de un año después me los retacharon a Querétaro y ahora están en una bolsa negra para regalarlos. Y aún así guarde algunas que seguramente tiraré después. Entre ellos, mi skinny jeans. Necia (e ilusa) que es una.
Por supuesto, esa ropa no tiene nada que ver con los recuerdos, aunque el encontrarte calzones que compraste para cuando cogí con un novio de hace añooosss indica que es momento de ir de interiors shoppin'. Eso ya se fue a la basura.
También me encontré ropa de recuerdos, como mi chamarra desgastada de la uni, mi falda de porrista de la prepa y claro, mi vestido de novia con anillos incluidos. Al ver esas cosas y no sentir nostalgia, tristeza o algún sentimiento desgarrador, es bueno, aunque da mucho por pensar de la temporalidad de esos sentimientos, que alguna vez te imaginaste como eternos.
Mas de una vez me he preguntado para que tengo en-cajadas todas esas cosas, si no se las voy a enseñar a alguien más, a heredar o a volver a usar. Específicamente, los anillos y el diamante, seguro que la lana me serviría de mucho en estos momentos. ¿Qué les voy a hacer cuando me muera?. Aun así no los tiro o vendo, son como "productos" de un momento de mi vida y sería como tirar a la basura un pedacito de mi.
Todo ese triquero me hizo darme cuenta que, aunque me niegue a tener un lugar fijo para mí, necesito tener un lugar para mis chivas. Esta última vez se quedaron divididas en 2 casas y aún no termino de juntar...
La Rosy was jir at
8:24 p.m.
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